Hace tiempo que leí (en 2005, aunque la primera edición en español es del 2001 y en inglés del 1999) el libro de Brian Greene
y reconozco su esfuerzo impresionante para divulgar el proceso de búsqueda de la teoría definitiva que agrupe la relatividad y el modelo estándar.
Pero no me convencen la teoría de las cuerdas y la teoría M, como respuesta definitiva a la teoría del todo. Sin entrar en el fondo de la cuestión, quiero plantear una serie de consideraciones:
Aunque se habla de varias teorías que al final se unifican en el teoría M, no estamos hablando de una teoría habitual sino de una meta-teoría, es decir, una teoría sobre las propiedades de una teoría definitiva de la que se carece concretamente. Así que no existe la teoría M, y tampoco es, ni parece que vaya a ser, falsable.
La teoría M es una teoría, o cinco, o un conjunto de construcciones matemáticas creadas expresamente para que encajen los datos, o para que puedan encajar algún día.
La complejidad de estas teorías es extraordinaria, lo que no dice nada a su favor. La Navaja de Ockham está en contra de la teoría de cuerdas.
No parece que existan avances significativos que concreten la teoría. El original en inglés es del 1999, hace más de 15 años y sigue siendo válido. O el libro es obsoleto o la teoría no avanza.
No tengo la impresión de que esta teoría resuelva los problemas y el atasco actual de la física, cuando ella misma está atascada. Pretende unificar dos teorías pero no resolver los problemas de la física actual.
La evolución del modelo de Ptolomeo al de Copérnico no fue complicarlo, sino colocar el sol en el centro.
La arquitectura del universo debe ser simple. Debemos rechazar instintivamente una teoría que no podemos comprender, que no hay manera de demostrar si funciona, que se fundamenta en unificar 'ad hoc' el modelo estándar con la relatividad. No es un cambio de paradigma sino un constructo para mantenerlas.
En todo, de vez en cuando hay que renovarse, lo que implica deshechar lo viejo, retroceder para avanzar.
La teoría M no es la solución elegante.
Aunque quizás me equivoque.
No hay comentarios:
Publicar un comentario